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| Cesar Rodriguez Gonzalez (1927-2011) R.I.P |
Esta foto que te saqué hace un par de años y que todavía es objeto de mi contemplación.
Siento que me miraste así, para este momento...para volver a verme después de un año de ausencias. Con esa dulzura entrañable en tu mirada, pero, al mismo tiempo, con la profundidad de los pensamientos, casi como una telepatía que yo solo puedo entender,en la oscuridad punzante de tus ojos.
La eternidad, toda tu vida y la mía, están en esta mirada tuya...llena de bondad y con respuestas a todas mis preguntas.
Solo yo puedo verlo, evocando el momento de esta instantánea.
Las preguntas, a veces, me abruman, y solo esta mirada única de amor, y de severidad para que me interrogue, por momentos, me devuelven el lugar de privilegio que me diste en los 56 años que compartimos.
Hoy, la orfandad, ha cambiado mi vida y la de toda la familia.
Sin embargo, soy portadora de tus genes, de lo que sigues siendo en mi, mientras yo permanezca. Por eso, sin lágrimas ni flores frente a tu nicho, esta sencilla evocación publica hacia ti y el recuerdo de cada acto de amor, comprensión y entrega que nos brindamos en pequeñisimas ceremonias, cotidianas y repetidas a lo largo de los años...gestos, acciones, pinceladas maestras que nos retratan a ambos, por toda la eternidad.
Solo la convicción cierta de haberte honrado en vida y haberte comprendido, y no reprocharme ni reprocharte un solo acto injusto o interesado, me permite hacerte este pequeño y único homenaje, en el día del recuerdo mas doloroso que he pasado en mi existencia.
Como vos bien sabes, sigo siendo una idiota y una inútil, a los ojos de los que solo buscan gestos grandilocuentes o de cinismo autoprotector. Pero no seria bien hija tuya sino fuera fiel a mi misma y a lo que me enseñaste, lo que guardo como un tesoro recibido y perpetuo.
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