Estos últimos meses se han caracterizado por un decaimiento, en la labor de mi bitácora. Creo que la estafa nacional de las Primarias y el triunfo posterior de octubre de nuestra Reina K, asestaron un duro golpe al prolífico trabajo que estaba llevando a cabo. Esta suerte de depresión literaria y bloguera, este mal sabor que no puedo quitarme, este aliento enrarecido y profesionalmente decepcionante no es de "mala perdedora", ya que, por otra parte, no milito en ningún partido político y soy una ciudadana absolutamente común. Mi desazón es por los porcentajes de mis conciudadanos que han optado por la confiscación de su libertad, por el atropello de sus garantías y por una destrucción, ya no lenta, sino más bien encaminada a paso redoblado, de la alicaída y pobrísima calidad institucional argentina. Como si el porcentaje de los victoriosos fuera óbice para terminar con lo poco que queda de aquella.
Mi desazón porque no hay nadie que represente a los que pensamos distinto al populismo K y porque autodenominarse hombre libre no significa nada en la actual kultura, wachiturra y grasa...sólo se ríen, con ignorancia supina, de lo que desconocen o no les interesa. Y este último acápite, el del Interés por las cosas que importan, porque los dineros públicos son de todos y no de nadie, y que ningún gobierno puede quitarnos, ni malversar, ...ese es el motivo de mi desazón. Que haya una mayoría que convalide y acepte el latrocinio, igual o peor de como se lo convalidaba en los 90 de Carlos Menem.
En las actuales circunstancias hay una Argentina que se siente extranjera en su propio país. Mi padre me reprochaba esta crítica constante, él que era español y eligió este país a instancias de sus padres, que terminaron sus días aquí, en estas pampas.
Papá, César Rodríguez Gonzalez, murió el 11 de diciembre pasado, en Buenos Aires.
Fue un gallego tozudo que se abrió camino a fuerza de constancia, empeño, voluntad, tezón y esfuerzo. Farmaceutico que trabajó en la industria del medicamento, en uno de los mas importantes laboratorios argentinos, y fue boticario de Hospital, su gran vocación, el Español, el de General Rodríguez, el Braulio Moyano, el Centro de Salud del barrio porte;o de Mataderos, por delante de la Ciudad Oculta y el Camino Negro.Papá estudió en la UBA donde había exámen de ingreso y era paga...sí, había que pagar para estudiar en la década del 40. Conoció a Perón y le firmó una foto porque mi abuelo, César Rodríguez Pardo, fue el primer secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado, ATE, en General Rodríguez, y Perón reunía a todos estos secretarios del país en la Secretaría de Trabajo y Previsión, en el a;o 45. De todas maneras mi abuelo no era peronista porque era Republicano.Y mi padre, para poder trabajar, tuvo que afiliarse al Partido Peronista. Así eran las cuestiones en aquella época, en que había hasta un delator o informador por manzana del pueblo.
Yo se Papá lo que quisiste a este país porque no volviste a tu terruño de nacimiento, salvo como viajero. Sé que estabas bastante harto, por no decir podrido de escuchar mis quejas y mis argumentos...que antes de morirte leíste de mi blog, casi como un evangelio, si hubieras sido creyente.
Yo, Papi, sólo quiero dejarle a mis lectores la docu-ficción que alguna vez escribí para que alguien la leyera y si le gustaba y tenía la plata, la filmara...Te reís, viejo...yo también.
Dejo a mis lectores Hotel de Inmigrantes, la venida de mi padre, con doce años, en el último barco que salió de Europa en el 1939, antes que se cerraran sus puertos por la guerra.
Es mi homenaje a este gallego tan argentino...que ya descansa en esta tierra, para el bendita.
HOTEL DE INMIGRANTES
Guión para primer acto de largometraje.
Sobreimprime
título
GENERAL
RODRÍGUEZ.PCIA BS. AS.
1939
Se escuchan leves sonidos de trozos pequeños de maderas macizas chocarse entre sí.
Hábiles dedos de mujer combinan los cilindros
de madera desde los que penden hilos blancos , haciendo la trama del encaje de bolillo.
Al tiempo se
escucha cantar como en un susurro
Cesariño pequeñino...a la fung y a la chiguei...tres
marias incontré...
Corte a:
Exterior-Galería de una casa que da a la verja sobre
la calle.Día.
Un hombre con
pulover gordo y un poco agujereado se detiene ante la puerta de alambre. Le
faltan dientes. Alza un diario Crítica doblado.
Mira hacia el interior de la galería.
Hombre
Perfecta...! el diario
para César.
Las manos
detienen el ajetreo de las maderas del bolillo.
El hombre, detrás de la puerta de alambre , con
rostro sombrío le despliega el diario.
Plano del
diario Crítica : Hitler quiere
Dantzig. Guerra en Europa.
Fundido a negro
Interior-Cocina de un economato en hospital .Día.
El lugar está
repleto de vapores. La luz es tenue.Se distinguen algunos hombres que lavan platos y
otros que , entre medio de las grandes caceloras humeantes, hacen distintas
tareas en la cocina.
Se escuchan los refritos
de la carne en la plancha.
Plano de la
plancha que es enorme. Decenas de
filetes se cocinan.
Un hombre
moreno, de cabellos negros cortos y enrulados,
en musculosa , con gran delantal y barbijo da vuelta los filetes con una
espátula de metal. Los vapores lo
inundan todo aún más .
Funde a
vapores de una locomotora :
Exterior-Estación de Trenes. Día.
Sobreimprime
título:
Estación de trenes de ORENSE
ESPAÑA
Vapores de una
locomotora al tiempo que se escucha el pitido
agudísimo.
Sobre el andén
un niño moreno, de cabellos negros ensortijados, de unos doce años,grandes ojos
negros, lleva un traje con pantalón largo, porta en cada una
de sus manos una pequeña valija de cuero gastado y una bolsa de tela.
Se abraza a
una anciana vestida totalmente de negro , con la cabeza cubierta por un pañuelo
también negro. Su cutis es blanco y tiene ojos claros lagrimosos. Le sonríe al
niño.
El niño sube
al tren. Le entrega unos papeles al guarda, que mirando a la anciana se toca la
punta de la visera.
El niño mira a
la anciana con rostro serio.
Le tira besos con su mano en una postura
rígida que aparenta control.
El tren
arranca . Se escucha el sonido progresivo de la máquina en medio de los
vapores.
Por las
ventanillas se ven a hombres y mujeres que saludan con sus manos.
La
anciana agita un gran
pañuelo blanco y le tira besos al niño
con la otra mano
.
El saca medio cuerpo afuera del vagón y abriendo
la bolsa de tela saca una bandera española la
que agita en señal de saludo a la anciana.
El rostro del
niño está contraído en una mueca que contiene el llanto.
Se ve lejos la
estación , en medio de las montañas. Diminuta , se ve a la anciana que aún
agita el pañuelo blanco.
El tren se
pierde en la primera curva de una montaña.
Corte a:
Interior-Día. Vagón .Asiento junto a la ventana.
El niño mira a
través del vidrio el paisaje de sierras y pequeños valles verdes. Resaltan aquí
y allá pequeñas casas de piedra , algunas vacas con su ternerita y niños que
corren tras de ellas.
El niño saca
su cabeza por la ventanilla. El viento
le azota el rostro. Mira hacia atrás.
A lo lejos , y
cada vez más distante, el mar.
El niño
levanta su cabeza y mira hacia el cielo . Extiende por afuera de la ventana su
brazo derecho y abre su mano.
Un niño en el
campo sigue con su mirada el vagón, con una ventanilla abierta y un niño que saca
sus brazos extendidos hacia afuera.
Corte a:
Subjetiva de
la bandera que el niño dobla con mucho cuidado, casi como una ceremonia.
El paño
tiene algunos jirones. La acaricia como planchándola y luego la mete en
la bolsa de tela.
La pone a un
costado, contra el otro asiento. Sobre sus rodillas tiene la pequeña valija.
El niño abre
la valija .En ella hay una muda de ropa interior, cuatro pares de medias
zurcidas. Un pulover. Un pantalón. Levanta levemente las prendas, como
reconociendolas.
Acomoda el
contenido .
En un bolsillo interno de la valijita hay
algunas pesetas. Toca las monedas y los dos billetes. Los guarda en el mismo
bolsillo.
Toma un
pequeño libro que está a un costado, en el fondo.
Mira el lomo.
en dónde lee ANCORA DE SALVACIÓN.
Lo guarda todo
. Cierra la valija.
Corte a :
Exterior -Muelle del Puerto de Barcelona.Día.
Sobreimprime título
PUERTO DE BARCELONA.
Un gran barco
, el Vulcania, está amarrado al
muelle.
El día es gris
y cae una incómoda llovizna. El inmenso muelle es un pandemónium de personas cargadas con bultos de tela y maletas
de cuero desvencijadas y niños que
algunas mujeres cargan en brazos y hombres que
llevan a otros a la a la rastra .
Un vendedor de
diarios muestra uno en cuya primera plana y a grandes titulares se lee Hitler invadió Polonia.
Una
horda humana se debate por subir al Vulcania, del
que flamea una bandera italiana.
Oficiales en la explanada piden papeles y organizan la subida al barco.
Un hombre con
uniforme negro con gorro de visera lleva al niño de la mano, abriéndose paso a los
empujones y codazos.
Ambos miran el
titular del diario.
El niño mira todo y oye a la gente hablar y
gritar en otros idiomas .
Se
escuchan en francés, italiano y catalán las frases entremezcladas de Por aquí, rápido, rápido...ven , ven...no
podremos subir...debemos irnos, ya, ya...
Al pié del
barco el hombre de negro entrega el niño a los oficiales que revisan los papeles.
Junto a ellos están dos niños
que hablan italiano .Visten
pantalón largo, pulover grueso, saco viejo y gorra. Llevan un atadito de tela.
Los italianos
miran al niño y le miran la bolsa.
Dicen entre sí Qué llevará...?, y si se la sacamos...?, sí, sí, se
la sacamos, rápido...
Uno de ellos
le quita la bolsa de tela. El niño trata de recuperarla a los manotones y profiriendo insultos en gallego.
El oficial
trata de agarrarlo para calmar la agitación y no puede.
Se fastidia.
Le deja el
trabajo de los papeles al otro y toma a los niños de la ropa.
Le pega un
gorrazo a los italianos para que dejen ya la bolsa de tela.
El niño la toma y la aprieta contra sí.
El oficial
diciéndole en italiano que se
quede quieto que ya viene el capitán le pega una patada en el trasero.
Los tres niños
suben por la explanada junto a otro oficial que baja al encuentro. Durante la
subida se miran con resentimiento y se amagan puñetazos.
El niño mira hacia atrás : el pandemónium del muelle, más allá los
edificios del puerto con agujeros de metralla.
Rostro
del niño. El viento le azota el rostro y le hace entrecerrar los ojos.
Se escucha la bocina del Vulcania por dos
veces seguidas.
Corte a :
Exterior-cubierta del Vulcania.Atardecer.
Se escucha la
voz de un viejo y el rostro del niño que
gira y lo mira sobresaltado.
Viejo
ey! chavál (le sonríe)..cuanto
extranjero no? tu no entiendes nada, eh?
Escuché aquí a los oficiales que
estarás a cargo del capitán. Bueno, pues bien,
quédate aquí , un poco conmigo. Yo también estoy solo y hablo nada más que español...(el niño lo mira con
atención)...cómo te llamas?
El viejo tiene
el rostro bronceado y completamente arrugado;tiene ojos claros y vivaces , ojos
que miran con atención . Viste ropas buenas pero gastadas. Tiene un sobretodo
cruzado gris, camisa blanca con cuello rozado. Una corbata negra con un pequeño
nudo. Una gran bufanda color gris en la que se ven puntos sueltos del tejido.
César
Me llamo César Francisco hijo.
Viejo (sonriéndole)
Quiere decir que ...tu padre es
César Francisco también.
César (Serio y locuaz)
Sí. Así me dijo mi abuela. Y mi
madre se llama Perfecta..es rubia y muy bonita.
Mi abuela siempre me llevó a la
Cañiza donde hay dos señoras iguales a mi madre,
son tejedoras de bolillo. Abuela siempre me las mostró para recordármela.
Viejo (sorprendido)
Tu madre es rubia ...?
César
Sí, y tiene ojos celestes...
Viejo
Pero chaval, si tu eres como un
morito...
César (siempre serio)
Sí...dice mi abuela que soy como mi
padre...pero que tengo la mirada de mi madre...(al
niño le brillan los ojos).
El viejo y el
niño se miran largamente.
Viejo (tomándole la cabeza con
las manos)
Cesariño, tu no conoces a tus
padres, no?
César (imperturbable)
No. Pero voy a Buenos Aires a
encontrarme con ellos.
Un oficial se
acerca a ellos. Habla español con acento italiano.
Oficial (con prepotencia)
Eh! tu ! niño! ven!...debes
reportarte al capitán.!
(mirándolo al viejo) y usted quién
es? muéstreme el pasaporte. Qué hace aquí
con el niño?
Viejo
Pues nada, oficial..Estoy tan solo
como él. Y sólo hablo español en medio de
tanto extranjero...
Oficial ( mirándolo con
soberbia, le habla en italiano)
Raza de
cobardes...si no fuera por nosotros no salen de aquí.
(en español) ven , tu , niño...con
el capitán !.(mirándolo al viejo) que te acompañe
éste también, que va a Buenos Aires.
El viejo ,
cuando el oficial se da vuelta, le hace un corte de manga. Lo mira al niño y le
sonríe y le guiña el ojo . El niño, por primera vez, le devuelve la sonrisa.
Corte a:
Exterior. Muelle del Puerto de Barcelona.Atardecer.
El Vulcania ha
zarpado.
El muelle de Barcelona está vacío. Unas pocas diminutas siluetas
agitan pañuelos blancos muy a lo lejos.. . Unas pocas luces lo iluminan .
La cubierta
del Vulcania está atestado de rostros serios , algunos compungidos y otros que
secan sus lágrimas.
La muchedumbre está en silencio.
Sólo se
escucha el ruido del mar y el viento .
Corte a :
Exterior.Proa del Vulcania. Noche.
La proa corta el mar.El agua la inunda y luego se escurre.
Corte a:
-Interior- Camarote con dos cuchetas.
Es un habitáculo pequeño sin ojo de buey.
Tiene dos cuchetas colgadas de una pared.
El viejo y
César se acomodan en las cuchetas.
Estiran las sábanas y las cobijas.
César (mirando en derredor del
habitáculo)
Por qué no tenemos ventanas...?
Viejo (mientras se despereza
sobre la cucheta y se tapa con las cobijas, vestido)
Cesariño....estamos en cuarta clase.
Aquí no hay ojos de buey. Así se le llaman
a las ventanas del barco.
César (con insistencia )
Pero ...cómo que no hay ventanas...?
y por donde miramos ?
Viejo
Cuando los ricachones , los que
viajan en primera, se hayan ido a
dormir.
vamos a cubierta... la tendremos para nosotros solos.
(Trata de acomodarse en la cucheta
pero con visible esfuerzo no puede. Se fastidia
y se sienta con los pies colgando) Tengo una gran idea para cuando vayamos
a cubierta de noche...mira, cuando no haya nadie iremos y...(se interrumpe)
Del corredor
de los camarotes se escuchan pasos apurados
de muchas personas El viejo se
incorpora y junto a César se acercan a la puerta.
Voz en off masculina:
El
Peñón, El Peñón..!
El viejo lo
mira a César con entusiasmo
Viejo
Rapaz! Gibraltar...! Ven , ven a ver
el Peñón!...
Insert:
Interior. Pasillo de los camarotes de tercera.
Los dos salen
del camarote. César lleva su bolsa de tela al hombro.
Corte a:
Interior.Escaleras metálicas de acceso a cubierta.
Suben tres
escaleras hasta que llegan a la cubierta. El viejo lo hace con esfuerzo.
El viejo está fatigado pero tiene su rostro como iluminado por la alegría
Corte a:
Exterior..
Cubierta del Vulcania totalmente iluminada. Noche
César y
Silvino se acercan a la baranda de la cubierta.
Desde ella se
vé el gran promontorio de Gibraltar.Está totalmente iluminado y de él se
despliegan hacia el cielo los reflectores.
El viejo le
señala el Peñón .
Los
ases de luz poderosísima surcan el cielo en redondo y en dirección hacia el
cielo de Africa.Se chocan entre sí., contrastando con la oscuridad de la noche.
Viejo ( con el rostro
repentinamente sombrío)
Mira César...esto es español...los
piratas ingleses y el hijo de puta de Franco
nos arrebataron ...(hace una pausa)...mira César...mira que bonito...aquí terminaba el mundo en
otras épocas...más allá (le señala hacia la
oscuridad ) el mar tenebroso...el finisterre.
El niño lo
mira con el rostro demudado.
Sonidos de silbatos y bocinas.
Desde el
Vulcania prenden una gran luz que
ilumina un sector del mar.
Insert: La gente apiñada en cubierta está expectante.
Insert :
Rostro del viejo.
En medio de un
grupo de gente inmóvil César , inquieto, le tira del sobretodo al viejo que no
repara en él. Todos miran en dirección
al haz de luz sobre el mar.
César (sacudiéndolo)
Eh! Silvino...! que
ocurre...Silvino...Silvino...
El viejo lo
mira. y lo toma por los hombros.
Viejo
Mira, César...mira...un submarino.
Los dos miran
hacia el sector que la luz ha dibujado.
Corte a:
Exterior- Sector del mar iluminado. Noche.
Del mar emerge
un submarino.
De la oscuridad lo único que resalta es la
bandera alemana del Tercer Reich que ondea frenéticamente por el viento.
El Vulcania hace un juego de luces con el
reflector. Se escuchan las mismas bocinas y silbatos.
Del submarino se ven unas siluetas diminutas que
hacen gestos.
Corte a:
Exterior-noche.Cubierta
La gente en
cubierta murmura entre sí.
César se
abraza al viejo.
César (acercándose al oído del
viejo)
Silvino...qué hacen?
Viejo (susurrándole)
Se saludan con los alemanes..., los
fascistas se saludan con los nazis.
Insert : Los
oficiales reunidos sobre la cubierta de proa
hacen el gesto del fascio .
Insert : Los
reflectores que hacen un juego de luz, los iluminan y recortan sus siluetas.
El viejo los
sigue mirando con atención. Tiene una mirada ruda y su rostro trasunta el odio.
César (a media voz en el oído
del viejo)
Silvino...tu eres republicano, no?
El viejo lo
chista largamente.
Viejo (señalándole la oscuridad)
Rapaz , no hables de esto hasta no
salir de la finisterre...
Funde a negro.
Abre a :
Exterior- Cubierta. Día soleado
César ,
siempre con la bolsa de tela, sube y baja escaleras con presteza. Corre por la
cubierta donde señoras con visones y sombreros toman sol. Corre tan rápido que
llama la atención.
Corte a:
Interior.Cocina del Vulcania. día.
Varias
personas vestidas de blanco y con altos gorros están en distintas mesadas de
metal enlozado.
Hacen distintas cosas: lavan verduras, pelan
papas, despluman pollos, baten en bols enormes.
Sobre los
mecheros, que son varios, varias ollas enormes largan vapor.
César entra
subrepticiamente. Le hace señas a una mujer gorda que lava vajilla.
La mujer le
sonríe y le entrega una cestita tapada con un repasador.
Corte a:
Exterior.Cubierta del Vulcania.Día.
El niño sale corriendo por la cubierta otra vez con
la cesta en la mano. Se choca con un oficial.
Oficial (con prepotencia le
habla en español con acento italiano, lo toma por el saco)
Ah! ladronzuelo...de dónde venís? de
la cocina, no? que has estado robando,
eh?
César (tratando de soltarse con
mucho esfuerzo)
Nada, nada, es un poco de pan que me
han dado...no es nada, nada...
El oficial
mirándole la bolsa de tela se la quiere requisar mientras le dice y allí que tienes eh? ladronzuelo, que tienes eh?. El oficial con mucho esfuerzo mientras el niño se retuerce, logra
meter la mano y saca apenas la bandera.
Oficial (dejándolo ir
finalmente)
Bah...va fangulo....
Corte a:
Interior del Camarote de César y Silvino.
El viejo está
recostado en una hamaca de la cubierta de primera clase.
César abre la
puerta con una sonrisa. El viejo se incorpora entusiasmado. Sacan de la
cestilla pan y algunas confituras.
Comen riéndose
y de buena gana.
Corte a:
14.-Exterior- Cubierta del Vulcania. Noche .
El viejo y
César están recostados en las hamacas de primera. Se tapan con las cobijas del
camarote.
César está
dormido, abrazado a la bolsa de tela.
El
viejo mira largamente al niño con su bolsa.
Lo despierta
con delicadeza ...vamos César, vamos
abajo...nos pescaremos una pulmonía y hay que llegar sano.
El niño
semidormido toma la bolsa y la cobija. El viejo hace lo mismo, llevándose una
hamaca.
Funde a negro.
Abre a:
Interior. Comedor de tercera clase.
Un gran salón
con mesas rectangulares y bancos a lo largo. Todos están comiendo un guiso en
platos de metal .
La
gente come en silencio.
César y
Silvino están uno al lado del otro.
César ve a los
niños italianos del muelle una mesa más allá . Le hacen morisquetas de burla.
El sigue
comiendo. El viejo levanta la vista y los mira.
Los niños se
quedan serios.
Corte a:
Interior-pasillo de camarotes de tercera
clase.
César camina
por el pasillo con una cestita cubierta por un repasador .Lleva al hombro la
bolsa de tela.
Del costado de
la escalera salen los niños italianos que le arrebatan la bolsa y echan a
correr escaleras arriba.
César tira la
cestita y los sigue en una carrera alocada.
Insert de
César subiendo y bajando escaleras,
corriendo por cubierta, llevándose gente por delante.
Corte a:
Interior del
camarote.
Silvino está
leyendo el pequeño libro de la valija de César.
El niño entra llorando.
Se tira sobre
la cucheta. Llora desconsoladamente.
Silvino lo
abraza con desesperación.
Viejo
César, César, que pasa, que ha
ocurrido, rapaz querido, dime...dime que pasado...
César (desconsolado)
La bolsa...la bolsa...
Viejo
La bolsa ? la bolsa!..
César
Los italianos...me han sacado la
bolsa...!
Nunca podré encontrar a mi
padre...(con desesperación)
Viejo (conmovido)
Pero Cesariño...cómo que no
encontrarás a tu padre? qué tiene que ver la bolsa..?.
César (con desesperación)
Es la señal ! la señal..! la señal
para encontrar a mi padre ..!.
Viejo(tomándole el rostro
totalmente deformado por el llanto)
Yo la encontraré, rapaz...te lo
prometo que la encontraré.
César ( con la voz entrecortada
por el llanto)
No conozco a mis padres...No sé como
son...La bandera era la señal, la señal
por la que papá me reconocerá...y ahora no la tengo ....ya no podré encontrarlo...Esa bandera es por la
que mi padre peleó en África. Solamente él
puede reconocerla...
Viejo ( abrazándolo )
Yo la encontraré César...yo la
encontraré...(entrecierra los ojos) los fascistas,
siempre los fascistas...
Plano del
diminuto camarote con dos hamacas . El
viejo y el niño abrazados y llorando.
Corte a:
Exterior- Cubierta del Vulcania. noche.
Los dos niños
italianos están sentados en las hamacas. Revisan la bolsa y sacan la bandera.
La despliegan. Se lee Regimiento de .... Se miran .
Plano de uno
de ellos con las cejas levantadas y la boca fruncida.
El otro se
levanta de la hamaca. Toma la bandera y
la bolsa. Levanta sus brazos y la deja ir con el viento.
Se van de cubierta
mascullando en italiano no era nada,
una miserable bandera...
Insert Silvino
pesadamente sube las escaleras hasta llegar a la puerta de cubierta de primera
clase.
Silvino sale
a cubierta. Ve a los niños italianos
doblar por la otra puerta de acceso.
Quiere
alcanzarlos pero se cae sobre una hamaca. Los niños lo advierten y desaparecen
de la vista.
Silvino llora
mientras repite...los fascistas...los
fascistas...siempre los fascistas .
El viento arrecia. Se escucha bramar el mar.
Un oficial que
pasa lo encuentra y le dice en italiano ...que
pasa hombre...que pasa?
Silvino le
contesta en italiano...nada hombre,
nada...soy sólo un viejo que llora...
El oficial se
aleja diciéndole por lo bajo Bah...va
fangulo..
Silvino se
levanta dificultosamente. El viento arrecia y le tira la gorra.
El mira en
dirección hacia dónde fue .
Insert :en un
conducto de ventilación la bandera está
sostenida por el viento.
Insert : paño
de la bandera donde se lee...5to Regimiento de Ceriñola.
Se dirige al
conducto de ventilación. Toma la bandera y
se abraza a ella.
Llora .Luego
se le mezcla el llanto con la risa y canta a toda voz ...somo lo fascisti terror du
comunisti...vulve a reirse y se hace el corte de manga.
Funde a negro.
Abre a:
Exterior- Cubierta del Vulcania. mañana a pleno sol.
Dia.
Desde la
cubierta se ve Buenos Aires en todo su
aspecto de metrópoli.
El pasaje de
tercera clase está apiñado en la cubierta y mira en dirección a la ciudad.
Insert de
Buenos Aires, vista desde el Río.
.Se ven los
rostros como iluminados. Todos están en silencio .
Entre ellos se
distingue a César y a Silvino.
Éste lo mira a César que oprime junto a su
pecho la bandera y mira hacia el puerto.
Corte a:
Exterior.Explanada del puerto de Buenos Aires Día.
Sol a pleno.
El puerto está
atestado de gente que agita pañuelos blancos.
Se escuchan
gritos y vítores.
Insert :Rostro
de César cómo mirando la meta tan ansiada.
Rostro de Silvino que lo mira a
César.
Le toca el hombro .
El
niño lo mira y le sonríe.
Silvino saca un papel del bolsillo y se lo
entrega diciéndole...a partir de ahora seremos paisanos en tierra de
promisión...
Se abrazan.
Suena
estruendosamente el Vulcania anunciado su llegada.
Insert: ancla
lanzada al borde del muelle.
Corte a:
Exterior- Muelle del Puerto de Buenos Aires. Día.
Desde el
muelle algunos marineros ayudan a
colocar el plachón para que la gente baje.
Desde el barco
familias enteras con niños en brazos alzan sus manos con pañuelos que agitan.
Tienen los
rostros sonrientes.Van cargados de bolsas y bultos diversos.
Insert :
rostros sonrientes desde el muelle miran hacia el barco agitando pañuelos.
Silvino baja
por el planchón .. Tiene en una mano una valija mediana y en la otra dos
hamacas de la cubierta del barco. Sonríe
hacia la multitud..
Plano del
rosto de Silvino que mira hacia la cubierta del Vulcania.
Insert :Plano
del niño que agita la bandera desde la cubierta todavía entre una multitud que
va bajando..
Rostros
felices que miran hacia la cubierta.
Corte a:
ExteriorCubierta del Vulcania. -día.
El niño mira
hacia el muelle .Su cara se inunda de alegría.Agita la bandera con más ímpetu.
Insert: la
gente sonrie y agita los pañuelos.
Insert:Plano
de la cubierta del Vulcania. Una bandera española se mueve entre la gente.
Insert. Plano
del muelle. No hay pañuelos que se agitan. Comienzan a verse claros.
Insert. Plano
de la cubierta del Vulcania. Un niño con una bandera a la que agita en su mano
corre de proa a popa.
De popa a
proa.
De proa a
popa.
Insert : Plano
del muelle desierto.
Plano de un
niño parado en la cubierta del Vulcania. Tiene los brazos a sus costados y en
la mano la bandera.
Corte a :
Interior- Oficina del Capitán. Día.
Dos hombres vestidos de uniforme hablan en
italiano ...Dónde
se metióDónde estaba cuando llegamos..! ...Hay que buscarlo...! Búsquénlo...!
Corte a:
Exterior - Cubierta del Vulcania. día.
Tres oficiales
se mueven por la cubierta del barco en actitud de búsqueda.
Insert de un
oficial en un camarote vacío. Luego sube la escalera.
Los oficiales
se siguen moviendo mirando todo a su paso por la cubierta..
Insert : Plano
de sogas gruesas de amarre que forman un tubo.
Un oficial que
mete la cabeza por el tubo mientras dice en italiano...
aquí
esta....aquí está....
Rostro de César que mira
hacia arriba desde el escondite de sogas.
Lo sacan. Lo
zamarrean y le dan una patada en el trasero.
Corte a:
Exterior- Puerta de entrada de un edificio con
cartel que reza HOTEL DE INMIGRANTES.
Día
Dos hombres
vestidos de negro llevan al niño de la mano.
Corte a:
InteriorHotel de Inmigrantes. -día.
Una habitación
con cincuenta camas una al lado de la otra.El mobiliario es sumamente modesto,
las camas de tubos metálicos redondeados y mesas de luz también metálicas.Las
ventanas no tienen cortinas.Las celocías son de madera y están abiertas.
Una mujer
lleva del hombro a César. Tiene en su mano la valija de cuero.
El niño lleva la bandera en su mano,
arrastrándola por el piso.
El dormitorio
de cincuenta camas está lleno con hombres , mujeres y niños callados.
Subjetiva de
la ventana en la que se refleja la cara de César, que apoya la nariz sobre el
vidrio y mira primero hacia los jardines del Hotel y luego, más allá el
Vulcania amarrado en las aguas de color leonino del Río de la Plata.
Rostro de
César a través del vidrio. Es de noche.
Subjetiva de
la ventana que refleja la cara de César.
Amanece sobre el Río de la Plata.
Plano del
dormitorio. La luz entra por los ventanales a pleno. El lugar está casi vacío.
Una mujer
entra en el dormitorio con una bandeja . Trae un plato con guiso y un vaso de
agua con un pan. El plato echa humo.
Mira al niño
que está con la nariz pegada a la ventana y abraza una bandera española.
Deja el plato
en la mesa de luz.
Le acaricia la
cabeza.
El niño sigue
imperturbable.
Subjetiva de
la ventana. Está atardeciendo. Negros
nubarrones y relámpagos sobre el Río de la Plata.
Corte a :
Exterior- Fachada del Hotel de Inmigrantes. noche.
Plano de las
ventanas sobre la vereda del hotel.
Llueve
torrencialmente.Se agitan las ramas de los árboles
El viento arrecia. Los postigos de las
ventanas se golpean contra los vidrios y paredes exteriores.
Plano de una
ventana en el primer piso. El niño sigue
contra el vidrio. Los relámpagos le iluminan alternativamente el rostro.
Corte a:
Interior- Dormitorio del Hotel de Inmigrantes.
Noche.
La gente está
agitada por la tormenta.
La luz de los
relámpagos iluminan a la gente que se acomoda en sus camas ,otros que se
sientan ,algunos que se paran y caminan hacia las ventanas y miran hacia el Río
.
Se escucha el llanto de niños.
Se escucha el
sonido de los postigos que golpean.
Se escucha el
sonido de un vidrio que se rompe.
La luz se
corta. .
Plano del
rostro de César a través de un vidrio roto que los relámpagos iluminan.
Subjetiva de
la valija de cuero que César abre y saca el pequeño libro.
El niño se
pone en la ventana con el vidrio roto.
Plano del
rostro del niño con la lluvia por delante.Lsus manos abren el libro.Cierra los
ojos.
Corte a
flash-back:
Exterior-Senda de montaña. Noche.
Llueve
torrencialmente sobre un paraje oscuro del que se vislumbra el barro del camino
por los relámpagos que lo iluminan.
Una mujer vestida de negro camina
dificultósamente sobre un camino
embarrado. Lleva un candil de aceite al que protege con su chal, que le cubre
la cabeza.
Mira hacia una
casa de piedra cubierta de vegetación que tiene una ventana iluminada
débilmente, en la que está un niño mirándola irse.
Mujer
Voy a lo del cura....el
Ancora...César... el Ancora...por si no llegamos a tiempo...
Corte a :
Interior.Habitación. Noche
Una habitación
pequeña construída de piedra, pintada a
la cal. Es de extrema austeridad.Dos jergones con mantas.Sobre la pared y como
único ornamento una cruz a lo alto entre ellas. A un costado un ropero rústico
y un arcón.
Plano de un
jergón en dónde un anciano respira con ronquidos dificultosos.
El niño va al
arcón y de él saca un pequeño libro.
Mira el lomo
que reza Ancora de Salvación.
César se
arrodilla a los pies del jergón , abre el libro , se persigna, le toca los
labios al anciano con una cruz. La pone
a su costado y comienza a recitar:
César ( lee con seriedad)
Por la agonía de tu hijo querido,
por las penas y amarguras que sentiste al pié de
la cruz, asísteme en la muerte.
La habitación
es iluminada por relámpagos .Cèsar se detiene en la lectura , mira hacia el
anciano.
Insert de la mano del niño que pone las puntas de
sus dedos en los orificios nasales del anciano.
Suena el
trueno. El niño mira hacia arriba .
El niño toma
nuevamente el libro, con nerviosismo, y recita sin parar:
César
Te adoro llaga sacratísima del
costado de mi dulce Jesús, abierto más por amor
a los hombres, que por el fiero golpe de la lanza. Dame, señor, asilo en tu corazón lavando mis manchas con la sangre y
agua que vertiste por esa llaga santísima.
Os adoro, manos sacrosantas, abiertas por mi amor, vosotras me criasteis, de vosotras espero la salvación.
El niño,
iluminado por un relámpago, vuelve a mirar al anciano. Vuelve a sonar el
trueno.
El niño sigue
con las letanías:
César
Jesús, ten piedad de él, Jesucristo,
ten piedad de él, Señor, ruega por él, Santa María,
ruega por él, San Abel, ruega por él, Coro de los justos, rogad, San Abraham ruega por él.
La mujer de negro aparece en el vano de la
puerta con el cura. Están totalmente empapados.
El viento y la lluvia entran con ellos.
El cura se
acerca al anciano y le cierra los ojos.
El niño con
una sonrisa mira hacia la mujer de negro que lo abraza y le dice...bien hecho mi rapaziño...bien hecho...
El niño la
abraza
César.
.abuela,
lo ayudé a llegar al cielo, el tío... ya
está en el Paraíso.
Funde
a negro.
Fin flash-back.
Abre a:
Interior-.Dormitorio del Hotel de Inmigrantes. Día.
El sol entra
por la ventana rota e ilumina a César sentado en el piso, que apoya su cabeza en el borde la cama. Está
dormido. Lo cubre la bandera.
Entra una
mujer con una bandeja que tieneun tazón humeante y pan. Está vestida
austeramente como mucama, con gran delantal y cofia en su cabeza.
Deja la
bandeja en la mesa de luz y le acaricia la cabeza con su mano.
El niño se
despierta. Mira el tazón. Se frota la cara y los ojos.
El niño vuelve
a la ventana.
La mujer se
aleja mirándolo con tristeza.
Corte a :
Interior. Cocina del economato.Día.
Un hombre en
musculosa y barbijo da vuelta filetes de carne que humean incansablemente.
Toma un gran
cucharón y revuelve una enorme olla que humea.
Corte a:
Plano de las
manos de una mujer que teje encaje de bolillo.
Se escucha el
sonido de las maderas golpearse incansablemente.
La mujer,
rubia de ojos celestes levanta su rostro de la tarea.
Voz masculina en off.
Perfecta...avísele a César que hay
un telegrama...(las manos se detienen del tejido)
...(el hombre toma aire)...dígale que tiene que ir al Hotel de inmigrantes(las manos sueltan el
tejido y los cilindros de madera que caen al
piso).
Corte a:
Exterior.Calle de tierra en pueblo. Día.
La mujer
rubia, Perfecta, corre por una avenida
de tierra gritando ...llegó el chico...llegó el chico...
Insert : Pasa la entrada en forma de arco que reza Hospital de Llanura V.L. y Planes.
Corre por una
vereda .
Plano de un
pabellón con cartel Economato y Cocina.
Corte a
Plano de las ruedas de un tren en carrera loca con
vapores y pitos de locomotora.
Corte a:
-Interior-. Hotel de Inmigrantes. día.
Puerta de
entrada al gran dormitorio.
La mucama
habla con un hombre de traje.
Mucama
No podemos seguir teniéndolo
aquí...anoche la gente se asustó más de las oraciones
de él que de la tormenta...sabe Ud. lo que rezaba? Oraciones para moribundos de ese libro....me lo han
dicho otros paisanos que lo conocen.
El hombre de
traje asiente con su cabeza.
La mujer entra
al dormitorio y se dirige a César, que sigue ante la ventana rota.
Mujer
Niño Francisco...recoja sus cosas
que lo llevaremos a otro sector.
El niño toma
la valija y se cubre con la bandera. Mira por el agujero de la ventana rota.
Su rostro es
de abatimiento y sus ojos están húmedos.
Mira a la
mujer con resignación.
Da dos pasos
con ella.
Se vuelve
rápidamente hacia la ventana.
Ve a un hombre
que corre por la vereda.
El hombre mira
hacia arriba y se para.
Ve a un niño con la bandera sobre sus hombros ,a
través de los vidrios rotos de la ventana.
El hombre echa
a correr.
Plano
del rostro del niño.De la seriedad del gesto imperturbable pasa al asombro.
El niño echa a
correr.
Se lleva por
delante a la mujer y al hombre, golpeándolos con la valija.
Corte a:
Interior- Hall con puerta de entrada y escalera de
acceso al dormitorio del primer piso. Día.
El niño baja
la escalera apresuradamente.
Insert : El
hombre la sube.
Se detienen
ambos y se miran.
Sus rostros
son casi iguales.
Se acercan
lentamente tomados del pasamanos, uno bajando y el otro subiendo.
Se abrazan.
La bandera los
cubre.
Plano de la
bandera española con jirones, en dónde se lee: 4to Regimiento de Cazadores de Ceriñola.
* * *