Translate

lunes, 26 de diciembre de 2011

Querido Papá.




Estos últimos meses se han caracterizado por un decaimiento, en la labor de mi bitácora. Creo que la estafa nacional de las Primarias y el triunfo posterior de octubre de nuestra Reina K, asestaron un duro golpe al prolífico trabajo que estaba llevando a cabo. Esta suerte de depresión literaria y bloguera, este mal sabor que no puedo quitarme, este aliento enrarecido y profesionalmente decepcionante no es de "mala perdedora", ya que, por otra parte, no milito en ningún partido político y soy una ciudadana absolutamente común. Mi desazón es por los porcentajes de mis conciudadanos que han optado por la confiscación de su libertad, por el atropello de sus garantías y por una destrucción, ya no lenta, sino más bien encaminada a paso redoblado, de la alicaída y pobrísima calidad institucional argentina. Como si el porcentaje de los victoriosos fuera óbice para terminar con lo poco que queda de aquella.
Mi desazón porque  no hay nadie que represente a los que pensamos distinto al populismo K y porque autodenominarse hombre libre no significa nada en la actual kultura, wachiturra y grasa...sólo se ríen, con ignorancia supina, de lo que desconocen o no les interesa. Y este último acápite, el del Interés por las cosas que importan, porque los dineros públicos son de todos y no de nadie, y que ningún gobierno puede quitarnos, ni malversar, ...ese es el motivo de mi desazón. Que haya una mayoría que convalide y acepte el latrocinio, igual o peor de como se lo convalidaba en los 90 de Carlos Menem.
En las actuales circunstancias hay una Argentina que se siente extranjera en su propio país. Mi padre me reprochaba esta crítica constante, él que era español y eligió este país a instancias de sus padres, que terminaron sus días aquí, en estas pampas.

Papá, César Rodríguez Gonzalez, murió el 11 de diciembre pasado, en Buenos Aires.
Fue un gallego tozudo que se abrió camino a fuerza de constancia, empeño, voluntad, tezón y esfuerzo. Farmaceutico que trabajó en la industria del medicamento, en uno de los mas importantes laboratorios argentinos, y fue boticario de Hospital, su gran vocación, el Español, el de General Rodríguez, el Braulio Moyano, el Centro de Salud del barrio porte;o de Mataderos, por delante de la Ciudad Oculta y el Camino Negro.Papá estudió en la UBA donde había exámen de ingreso y era paga...sí, había que pagar para estudiar en la década del 40. Conoció a Perón y le firmó una foto porque mi abuelo, César Rodríguez Pardo, fue el primer secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado, ATE, en General Rodríguez, y Perón reunía a todos estos secretarios del país en la Secretaría de Trabajo y Previsión, en el a;o 45. De todas maneras mi abuelo no era peronista porque era Republicano.Y mi padre, para poder trabajar, tuvo que afiliarse al Partido Peronista. Así eran las cuestiones en aquella época, en que había hasta un delator o informador por manzana del pueblo.

Yo se Papá lo que quisiste a este país porque no volviste a tu terruño de nacimiento, salvo como viajero. Sé que estabas bastante harto, por no decir podrido de escuchar mis quejas y mis argumentos...que antes de morirte leíste de mi blog, casi como un evangelio, si hubieras sido creyente.
Yo, Papi, sólo quiero dejarle a mis lectores la docu-ficción que alguna vez escribí para que alguien la leyera y si le gustaba y tenía la plata, la filmara...Te reís, viejo...yo también.

Dejo a mis lectores Hotel de Inmigrantes, la venida de mi padre, con doce años, en el último barco que salió de Europa en el 1939, antes que se cerraran sus puertos por la guerra.

Es mi homenaje a este gallego tan argentino...que ya descansa en esta tierra, para el bendita.



                        HOTEL DE INMIGRANTES


Guión para primer acto de largometraje.

 Abre de negro

Sobreimprime título

                         GENERAL RODRÍGUEZ.PCIA BS. AS.
                                                           1939

Se escuchan leves sonidos de trozos pequeños de maderas macizas chocarse entre sí.


Hábiles dedos de mujer combinan los cilindros de madera desde los que penden hilos blancos , haciendo la trama del encaje de bolillo.

Al tiempo se escucha cantar como en un susurro

                        Cesariño pequeñino...a la fung y a la chiguei...tres marias                                      incontré...

Corte a:

Exterior-Galería de una casa que da a la verja sobre la calle.Día.
Un hombre con pulover gordo y un poco agujereado se detiene ante la puerta de alambre. Le faltan dientes. Alza un diario Crítica doblado. Mira hacia el interior de la galería.

                                   Hombre
                        Perfecta...! el diario para César.

Las manos detienen  el ajetreo de las maderas del bolillo.

El  hombre, detrás de la puerta de alambre , con rostro sombrío le despliega el diario.
Plano del diario Crítica : Hitler quiere Dantzig. Guerra en Europa.

Fundido a negro

Interior-Cocina de un economato en hospital .Día.
El lugar está repleto de vapores. La luz es tenue.Se distinguen algunos hombres que lavan platos y otros que , entre medio de las grandes caceloras humeantes, hacen distintas tareas en la cocina.
Se escuchan los refritos de la carne en la plancha.

Plano de la plancha que es enorme. Decenas de filetes se cocinan.

Un hombre moreno, de cabellos negros cortos y enrulados,  en musculosa , con gran delantal y barbijo da vuelta los filetes con una espátula de metal. Los vapores lo inundan todo aún más .

Funde a vapores de una locomotora :

Exterior-Estación de Trenes. Día.
Sobreimprime título:
                                   Estación de trenes de ORENSE
                                                           ESPAÑA

Vapores de una locomotora al tiempo que se escucha el pitido agudísimo.

Sobre el andén un niño moreno, de cabellos negros ensortijados, de unos doce años,grandes ojos negros,  lleva un  traje con pantalón largo, porta en cada una de sus manos  una pequeña valija de cuero gastado y una bolsa de tela.
Se abraza a una anciana vestida totalmente de negro , con la cabeza cubierta por un pañuelo también negro. Su cutis es blanco y tiene ojos claros lagrimosos. Le sonríe al niño.

El niño sube al tren. Le entrega unos papeles al guarda, que mirando a la anciana se toca la punta de la visera.

El niño mira a la anciana con rostro serio.
 Le tira besos con su mano en una postura rígida que aparenta control.

El tren arranca . Se escucha el sonido progresivo de la máquina en medio de los vapores.

Por las ventanillas se ven a hombres y mujeres que saludan con sus manos.

La anciana  agita  un gran pañuelo blanco y le tira besos al niño  con la otra mano
.
El  saca medio cuerpo afuera del vagón y abriendo la bolsa de tela  saca una bandera española la que agita en señal de saludo a la anciana.

El rostro del niño está contraído en una mueca que contiene el llanto.

Se ve lejos la estación , en medio de las montañas. Diminuta , se ve a la anciana que aún agita el pañuelo blanco.

El tren se pierde en la primera curva de una montaña.

Corte a:

Interior-Día. Vagón .Asiento junto a la ventana.
El niño mira a través del vidrio el paisaje de sierras y pequeños valles verdes. Resaltan aquí y allá pequeñas casas de piedra , algunas vacas con su ternerita y niños que corren tras de ellas.

El niño saca su cabeza por la ventanilla.  El viento le azota el rostro. Mira hacia atrás.
A lo lejos , y cada vez más distante, el mar.

El niño levanta su cabeza y mira hacia el cielo . Extiende por afuera de la ventana su brazo derecho y abre su mano.

Un niño en el campo sigue con su mirada  el vagón,  con una ventanilla abierta y un niño que saca sus brazos extendidos hacia afuera.

Corte a:

Subjetiva de la bandera que el niño dobla con mucho cuidado, casi como una ceremonia.
 El paño  tiene algunos jirones. La acaricia como planchándola y luego la mete en la bolsa de tela.

La pone a un costado, contra el otro asiento. Sobre sus rodillas tiene la pequeña valija.

El niño abre la valija .En ella hay una muda de ropa interior, cuatro pares de medias zurcidas. Un pulover. Un pantalón. Levanta levemente las prendas, como reconociendolas.
Acomoda el contenido .
 En un bolsillo interno de la valijita hay algunas pesetas. Toca las monedas y los dos billetes. Los guarda en el mismo bolsillo.
Toma un pequeño libro que está a un costado, en el fondo.
Mira el lomo. en dónde lee  ANCORA DE SALVACIÓN.

Lo guarda todo . Cierra la valija.

Corte a :

Exterior -Muelle del Puerto de Barcelona.Día.
Sobreimprime título

                                    PUERTO DE BARCELONA.


Un gran barco , el Vulcania, está amarrado al muelle.
El día es gris y cae una incómoda llovizna. El inmenso muelle es un pandemónium de personas cargadas con bultos de tela y maletas de cuero desvencijadas  y niños que algunas mujeres cargan en brazos y hombres que  llevan a otros a la a la rastra .

Un vendedor de diarios muestra uno en cuya primera plana y a grandes titulares se lee Hitler invadió Polonia.


Una horda humana se debate por subir al Vulcania, del que flamea una bandera italiana.


Oficiales en la explanada piden papeles y organizan la subida al barco.

Un hombre con uniforme negro con gorro de visera lleva al niño de la mano, abriéndose paso a los empujones y codazos.
Ambos miran el titular del diario.
El niño mira todo y oye  a la gente hablar y gritar en otros idiomas .
Se escuchan en francés, italiano y catalán las frases entremezcladas de Por aquí, rápido, rápido...ven , ven...no podremos subir...debemos irnos, ya, ya...

Al pié del barco el hombre de negro entrega el niño a los oficiales que revisan los papeles.
 Junto a ellos están  dos niños  que hablan italiano .Visten pantalón largo, pulover grueso, saco viejo y gorra. Llevan un atadito de tela.
Los italianos miran al niño y le miran la bolsa.

Dicen entre sí Qué llevará...?, y si se la sacamos...?, sí, sí, se la sacamos, rápido...

Uno de ellos le quita la bolsa de tela. El niño trata de recuperarla a los manotones y profiriendo insultos en gallego.

El oficial trata de agarrarlo para calmar la agitación y no puede.
 Se fastidia.
Le deja el trabajo de los papeles al otro y toma a los niños de la ropa.
Le pega un gorrazo a los  italianos  para que dejen ya la bolsa de tela.
 El niño la toma y la aprieta contra sí.

El oficial diciéndole en italiano  que se quede quieto que ya viene el capitán le pega una patada en el trasero.

Los tres niños suben por la explanada junto a otro oficial que baja al encuentro. Durante la subida se miran con resentimiento y se amagan puñetazos.

 El niño mira hacia atrás : el pandemónium del muelle, más allá los edificios del puerto con agujeros de metralla.

Rostro del niño. El viento le azota el rostro y le hace entrecerrar los ojos.

 Se escucha la bocina del Vulcania por dos veces seguidas.

Corte a :

Exterior-cubierta del Vulcania.Atardecer.
Se escucha la voz de un viejo  y el rostro del niño que gira y  lo mira sobresaltado.

                                   Viejo
            ey! chavál (le sonríe)..cuanto extranjero no? tu no entiendes nada, eh?
            Escuché aquí a los oficiales que estarás a cargo del capitán. Bueno, pues bien, quédate aquí , un poco conmigo. Yo también estoy solo y hablo nada    más que español...(el niño lo mira con atención)...cómo te llamas?

El viejo tiene el rostro bronceado y completamente arrugado;tiene ojos claros y vivaces , ojos que miran con atención . Viste ropas buenas pero gastadas. Tiene un sobretodo cruzado gris, camisa blanca con cuello rozado. Una corbata negra con un pequeño nudo. Una gran bufanda color gris en la que se ven puntos sueltos del tejido.


                                   César
            Me llamo César Francisco hijo.

                                   Viejo (sonriéndole)
            Quiere decir que ...tu padre es César Francisco también.

                                   César (Serio y locuaz)
            Sí. Así me dijo mi abuela. Y mi madre se llama Perfecta..es rubia y muy    bonita.
            Mi abuela siempre me llevó a la Cañiza donde hay dos señoras iguales a mi        madre, son tejedoras de bolillo. Abuela siempre me las mostró para        recordármela.

                                   Viejo (sorprendido)
            Tu madre es rubia ...?

                                   César
            Sí, y tiene ojos celestes...

                                   Viejo
            Pero chaval, si tu eres como un morito...

                                   César (siempre serio)
            Sí...dice mi abuela que soy como mi padre...pero que tengo la mirada de mi         madre...(al niño le brillan los ojos).

El viejo y el niño se miran largamente.

                                   Viejo (tomándole la cabeza con las manos)
            Cesariño, tu no conoces a tus padres, no?

                                   César (imperturbable)
            No. Pero voy a Buenos Aires a encontrarme con ellos.

Un oficial se acerca a ellos. Habla español con acento italiano.
           
                                   Oficial (con prepotencia)
            Eh! tu ! niño! ven!...debes reportarte al capitán.!
            (mirándolo al viejo) y usted quién es? muéstreme el pasaporte. Qué hace             aquí con el niño?

                                   Viejo
            Pues nada, oficial..Estoy tan solo como él. Y sólo hablo español en medio           de tanto extranjero...

                                   Oficial ( mirándolo con soberbia, le habla en italiano)
            Raza de cobardes...si no fuera por nosotros no salen de aquí.
            (en español) ven , tu , niño...con el capitán !.(mirándolo al viejo) que te    acompañe éste también, que va a Buenos Aires.

El viejo , cuando el oficial se da vuelta, le hace un corte de manga. Lo mira al niño y le sonríe y le guiña el ojo . El niño, por primera vez, le devuelve la sonrisa.

Corte a:

Exterior. Muelle del Puerto de Barcelona.Atardecer.
El Vulcania ha zarpado.

El  muelle de Barcelona  está vacío. Unas pocas diminutas siluetas agitan pañuelos blancos muy a lo lejos.. . Unas pocas luces lo iluminan .

La cubierta del Vulcania está atestado de rostros serios , algunos compungidos y otros que secan sus lágrimas.

 La muchedumbre está en silencio.
Sólo se escucha el ruido del mar y el viento .

Corte a :

Exterior.Proa del Vulcania. Noche.
La proa corta el mar.El agua la  inunda y luego  se escurre.

Corte a:

-Interior- Camarote con dos cuchetas.
 Es un habitáculo pequeño sin ojo de buey. Tiene dos cuchetas colgadas de una pared.
El viejo y César  se acomodan en las cuchetas. Estiran las sábanas y las cobijas.
                       
                                   César (mirando en derredor del habitáculo)
            Por qué no tenemos ventanas...?

                                   Viejo (mientras se despereza sobre la cucheta y se tapa con                                                las cobijas, vestido)
            Cesariño....estamos en cuarta clase. Aquí no hay ojos de buey. Así se le    llaman a las ventanas del barco.

                                   César (con insistencia )
            Pero ...cómo que no hay ventanas...? y por donde miramos ?


                                   Viejo
            Cuando los ricachones , los que viajan en primera,  se hayan ido a dormir.
            vamos a cubierta... la tendremos para nosotros solos.
            (Trata de acomodarse en la cucheta pero con visible esfuerzo no puede. Se         fastidia y se sienta con los pies colgando) Tengo una gran idea  para cuando      vayamos a cubierta de noche...mira, cuando no haya nadie iremos y...(se          interrumpe)

Del corredor de los camarotes se escuchan pasos apurados  de muchas personas   El viejo se incorpora y junto a César se acercan a la puerta.

                                   Voz en off masculina:
                                   El Peñón, El Peñón..!

El viejo lo mira a César con entusiasmo

                                   Viejo
            Rapaz! Gibraltar...! Ven , ven a ver el Peñón!...

Insert:
Interior. Pasillo de los camarotes de tercera.
Los dos salen del camarote. César lleva su bolsa de tela al hombro.

Corte a:

Interior.Escaleras metálicas de acceso a cubierta.
Suben tres escaleras hasta que llegan a la cubierta. El viejo lo hace con esfuerzo.
 El viejo está fatigado pero tiene  su rostro como iluminado por la alegría

Corte a:

Exterior..  Cubierta del Vulcania totalmente iluminada. Noche
César y Silvino se acercan a la baranda de la cubierta.

Desde ella se vé el gran promontorio de Gibraltar.Está totalmente iluminado y de él se despliegan hacia el cielo los reflectores.

El viejo le señala el Peñón .

Los ases de luz poderosísima surcan el cielo en redondo y en dirección hacia el cielo de Africa.Se chocan entre sí., contrastando con la oscuridad de la noche.


                                   Viejo ( con el rostro repentinamente sombrío)
            Mira César...esto es español...los piratas ingleses y el hijo de puta de         Franco nos arrebataron ...(hace una pausa)...mira César...mira que         bonito...aquí terminaba el mundo en otras épocas...más allá (le señala      hacia la oscuridad ) el mar tenebroso...el finisterre.

El niño lo mira con el rostro demudado.

Sonidos de silbatos y bocinas.

Desde el Vulcania prenden una gran luz que ilumina un sector del mar.

 Insert: La gente apiñada  en cubierta está expectante.

Insert : Rostro del viejo.

En medio de un grupo de gente inmóvil César , inquieto, le tira del sobretodo al viejo que no repara en él. Todos miran en dirección al haz de luz sobre el mar.

                                   César (sacudiéndolo)
            Eh! Silvino...! que ocurre...Silvino...Silvino...

El viejo lo mira. y lo toma por los hombros.


                                   Viejo
            Mira, César...mira...un submarino.

Los dos miran hacia el sector que la luz ha dibujado.

Corte a:

Exterior- Sector del mar iluminado. Noche.
Del mar emerge un submarino.

 De la oscuridad lo único que resalta es la bandera alemana del Tercer Reich que ondea frenéticamente por el viento.

 El Vulcania hace un juego de luces con el reflector. Se escuchan las mismas bocinas y silbatos.
Del  submarino se ven unas siluetas diminutas que hacen gestos.

Corte a:

Exterior-noche.Cubierta
La gente en cubierta murmura entre sí.
César se abraza al viejo.

                                   César (acercándose al oído del viejo)
            Silvino...qué hacen?
                       
                                   Viejo (susurrándole)
            Se saludan con los alemanes..., los fascistas se saludan con los nazis.

Insert : Los oficiales reunidos sobre la cubierta de proa  hacen el gesto del fascio .
Insert : Los reflectores que hacen un juego de luz, los iluminan y recortan sus siluetas.

El viejo los sigue mirando con atención. Tiene una mirada ruda y su rostro trasunta el odio.

                                   César (a media voz en el oído del viejo)
            Silvino...tu eres republicano, no?

El viejo lo chista largamente.
                                  
                                   Viejo (señalándole la oscuridad)
            Rapaz , no hables de esto hasta no salir de la finisterre...


Funde a negro.

Abre a :

Exterior- Cubierta. Día soleado
César , siempre con la bolsa de tela, sube y baja escaleras con presteza. Corre por la cubierta donde señoras con visones y sombreros toman sol. Corre tan rápido que llama la atención.

Corte a:

Interior.Cocina del Vulcania. día.
Varias personas vestidas de blanco y con altos gorros están en distintas mesadas de metal enlozado.
 Hacen distintas cosas: lavan verduras, pelan papas, despluman pollos, baten en bols enormes.

Sobre los mecheros, que son varios, varias ollas enormes largan vapor.

César entra subrepticiamente. Le hace señas a una mujer gorda que lava vajilla.
La mujer le sonríe y le entrega una cestita tapada con un repasador.

Corte a:


Exterior.Cubierta del Vulcania.Día.
El niño  sale corriendo por la cubierta otra vez con la cesta en la mano. Se choca con un oficial.

                                   Oficial (con prepotencia le habla en español con acento                                          italiano, lo toma por el saco)
            Ah! ladronzuelo...de dónde venís? de la cocina, no? que has estado           robando, eh?

                                   César (tratando de soltarse con mucho esfuerzo)
            Nada, nada, es un poco de pan que me han dado...no es nada, nada...

El oficial mirándole la bolsa de tela se la quiere requisar mientras le dice y allí que tienes eh? ladronzuelo, que tienes eh?. El oficial con mucho esfuerzo mientras el niño se retuerce, logra meter la mano y saca apenas la bandera.

                                   Oficial (dejándolo ir finalmente)
            Bah...va fangulo....

Corte a:

Interior del Camarote de César y Silvino.
El viejo está recostado en una hamaca de la cubierta de primera clase.     
César abre la puerta con una sonrisa. El viejo se incorpora entusiasmado. Sacan de la cestilla pan y algunas confituras.
Comen riéndose y de buena gana.

Corte a:

14.-Exterior- Cubierta del Vulcania. Noche .
El viejo y César están recostados en las hamacas de primera. Se tapan con las cobijas del camarote.
César está dormido, abrazado a la bolsa de tela.

 El viejo mira largamente al niño con su bolsa.
Lo despierta con delicadeza ...vamos César, vamos abajo...nos pescaremos una pulmonía y hay que llegar sano.
El niño semidormido toma la bolsa y la cobija. El viejo hace lo mismo, llevándose una hamaca.

Funde a  negro.

Abre a:

Interior. Comedor de tercera clase.
Un gran salón con mesas rectangulares y bancos a lo largo. Todos están comiendo un guiso en platos de metal .

La gente come en silencio.

César y Silvino están uno al lado del otro.
César ve a los niños italianos del muelle una mesa más allá . Le hacen morisquetas de burla.
El sigue comiendo. El viejo levanta la vista y los mira.
Los niños se quedan serios.

Corte a:

 Interior-pasillo de camarotes de tercera clase.
César camina por el pasillo con una cestita cubierta por un repasador .Lleva al hombro la bolsa de tela.
Del costado de la escalera salen los niños italianos que le arrebatan la bolsa y echan a correr escaleras arriba.

César tira la cestita y los sigue en una carrera alocada.

Insert de César  subiendo y bajando escaleras, corriendo por cubierta, llevándose gente por delante.

Corte a:

 Interior del camarote.
Silvino está leyendo el pequeño libro de la valija de César.
 El niño entra llorando.
Se tira sobre la cucheta. Llora desconsoladamente.
Silvino lo abraza con desesperación.

                                   Viejo
            César, César, que pasa, que ha ocurrido, rapaz querido, dime...dime que   pasado...

                                   César (desconsolado)
            La bolsa...la bolsa...

                                   Viejo
            La bolsa ? la bolsa!..

                                   César
            Los italianos...me han sacado la bolsa...!
            Nunca podré encontrar a mi padre...(con desesperación)

                                   Viejo (conmovido)
            Pero Cesariño...cómo que no encontrarás a tu padre? qué tiene que ver la             bolsa..?.

                                   César (con desesperación)
            Es la señal ! la señal..! la señal para encontrar a mi padre ..!.

                                   Viejo(tomándole el rostro totalmente deformado por el llanto)
            Yo la encontraré, rapaz...te lo prometo que la encontraré.

                                   César ( con la voz entrecortada por el llanto)
            No conozco a mis padres...No sé como son...La bandera era la señal, la     señal por la que papá me reconocerá...y ahora no la tengo ....ya no podré            encontrarlo...Esa bandera es por la que mi padre peleó en África. Solamente           él puede reconocerla...

                                   Viejo ( abrazándolo )
            Yo la encontraré César...yo la encontraré...(entrecierra los ojos) los           fascistas, siempre los fascistas...

Plano del diminuto camarote  con dos hamacas . El viejo y el niño abrazados y llorando.

Corte a:

Exterior- Cubierta del Vulcania. noche.
Los dos niños italianos están sentados en las hamacas. Revisan la bolsa y sacan la bandera. La despliegan. Se lee Regimiento de .... Se miran .
Plano de uno de ellos con las cejas levantadas y la boca fruncida.
El otro se levanta  de la hamaca. Toma la bandera y la bolsa. Levanta sus brazos y la deja ir con el viento.
Se van de cubierta mascullando en italiano no era nada, una miserable  bandera...


Insert Silvino pesadamente sube las escaleras hasta llegar a la puerta de cubierta de primera clase.

Silvino sale a  cubierta. Ve a los niños italianos doblar por la otra puerta de acceso.
Quiere alcanzarlos pero se cae sobre una hamaca. Los niños lo advierten y desaparecen de la vista.
Silvino llora mientras repite...los fascistas...los fascistas...siempre los fascistas .

El viento arrecia. Se escucha  bramar el mar.

Un oficial que pasa lo encuentra y le dice en italiano ...que pasa hombre...que pasa?

Silvino le contesta en italiano...nada hombre, nada...soy sólo un viejo que llora...

El oficial se aleja diciéndole por lo bajo Bah...va fangulo..

Silvino se levanta dificultosamente. El viento arrecia y le tira la gorra.

El mira en dirección hacia dónde fue .

Insert :en un conducto de ventilación  la bandera está sostenida por el viento.
Insert : paño de la bandera donde se lee...5to Regimiento de Ceriñola.

Se dirige al conducto de ventilación. Toma la bandera y  se abraza a ella.

Llora .Luego se le mezcla el llanto con la risa y canta a toda voz ...somo lo fascisti terror du comunisti...vulve a reirse y se hace el corte de manga.

Funde a negro.

Abre a:

Exterior- Cubierta del Vulcania. mañana a pleno sol. Dia.
Desde la cubierta  se ve Buenos Aires en todo su aspecto de metrópoli.
El pasaje de tercera clase está apiñado en la cubierta y mira en dirección a la ciudad.

Insert de Buenos Aires, vista desde el Río.

.Se ven los rostros como iluminados. Todos están en silencio .
Entre ellos se distingue a César y a Silvino.
 Éste lo mira a César que oprime junto a su pecho la bandera y mira hacia el puerto.

Corte a:

Exterior.Explanada del puerto de Buenos Aires Día. Sol a pleno.

El puerto está atestado de gente que agita pañuelos blancos.
Se escuchan gritos y vítores.

Insert :Rostro de César cómo mirando la meta tan ansiada.
            Rostro de Silvino que lo mira a César.
            Le toca el hombro .
            El niño lo mira y le sonríe.
             Silvino saca un papel del bolsillo y se lo entrega  diciéndole...a partir de   ahora seremos paisanos en tierra de promisión...
            Se abrazan.

Suena estruendosamente el Vulcania anunciado su llegada.
Insert: ancla lanzada al borde del muelle.

Corte a:

Exterior- Muelle del Puerto de Buenos Aires. Día.
Desde el muelle  algunos marineros ayudan a colocar el plachón para que la gente baje.
Desde el barco familias enteras con niños en brazos alzan sus manos con pañuelos que agitan.
Tienen los rostros sonrientes.Van cargados de bolsas y bultos diversos.

Insert : rostros sonrientes desde el muelle miran hacia el barco agitando pañuelos.

Silvino baja por el planchón .. Tiene en una mano una valija mediana y en la otra dos hamacas de la cubierta del barco. Sonríe  hacia la multitud..

Plano del rosto de Silvino que mira hacia la cubierta del Vulcania.

Insert :Plano del niño que agita la bandera desde la cubierta todavía entre una multitud que va bajando..

Rostros felices que miran hacia la cubierta.

Corte a:

ExteriorCubierta del Vulcania. -día.
El niño mira hacia el muelle .Su cara se inunda de alegría.Agita la bandera con más ímpetu.

Insert: la gente sonrie y agita los pañuelos.

Insert:Plano de la cubierta del Vulcania. Una bandera española se mueve entre la gente.

Insert. Plano del muelle. No hay pañuelos que se agitan. Comienzan a verse claros.

Insert. Plano de la cubierta del Vulcania. Un niño con una bandera a la que agita en su mano corre de proa a popa.

De popa a proa.

De proa a popa.

Insert : Plano del muelle desierto.

Plano de un niño parado en la cubierta del Vulcania. Tiene los brazos a sus costados y en la mano la bandera.


Corte a :


Interior- Oficina del Capitán. Día.
 Dos hombres vestidos de uniforme hablan en italiano ...Dónde se metióDónde estaba cuando llegamos..! ...Hay que buscarlo...! Búsquénlo...!

Corte a:

Exterior - Cubierta del Vulcania. día.
Tres oficiales se mueven por la cubierta del barco en actitud de búsqueda.

Insert de un oficial en un camarote vacío. Luego sube la escalera.

Los oficiales se siguen moviendo mirando todo a su paso por la cubierta..

Insert : Plano de sogas gruesas de amarre que forman un tubo.


Un oficial que mete la cabeza por el tubo mientras dice en italiano...
aquí esta....aquí está....

Rostro de César que mira hacia arriba desde el escondite de sogas.

Lo sacan. Lo zamarrean y le dan una patada en el trasero.

Corte a:

Exterior- Puerta de entrada de un edificio con cartel  que reza HOTEL DE INMIGRANTES. Día
Dos hombres vestidos de negro llevan al niño de la mano.

Corte a:

InteriorHotel de Inmigrantes. -día.
Una habitación con cincuenta camas una al lado de la otra.El mobiliario es sumamente modesto, las camas de tubos metálicos redondeados y mesas de luz también metálicas.Las ventanas no tienen cortinas.Las celocías son de madera y están abiertas.

Una mujer lleva del hombro a César. Tiene en su mano la valija de cuero.

 El niño lleva la bandera en su mano, arrastrándola por el piso.

El dormitorio de cincuenta camas está lleno con hombres , mujeres y niños callados.
Subjetiva de la ventana en la que se refleja la cara de César, que apoya la nariz sobre el vidrio y mira primero hacia los jardines del Hotel y luego, más allá el Vulcania amarrado en las aguas de color leonino del Río de la Plata.

Rostro de César a través del vidrio. Es de noche.

Subjetiva de la ventana  que refleja la cara de César. Amanece sobre el Río de la Plata.

Plano del dormitorio. La luz entra por los ventanales a pleno. El lugar está casi vacío.

Una mujer entra en el dormitorio con una bandeja . Trae un plato con guiso y un vaso de agua con un pan. El plato echa humo.
Mira al niño que está con la nariz pegada a la ventana y abraza una bandera española.
Deja el plato en la mesa de luz.
Le acaricia la cabeza.
El niño sigue imperturbable.

Subjetiva de la ventana. Está atardeciendo.  Negros nubarrones y relámpagos sobre el Río de la Plata.

Corte a :

Exterior- Fachada del Hotel de Inmigrantes. noche.
Plano de las ventanas sobre la vereda del hotel.
Llueve torrencialmente.Se agitan las ramas de los árboles

 El viento arrecia. Los postigos de las ventanas se golpean contra los vidrios y paredes exteriores.

Plano de una ventana en el primer piso. El  niño sigue contra el vidrio. Los relámpagos le iluminan alternativamente el rostro.

Corte a:

Interior- Dormitorio del Hotel de Inmigrantes. Noche.
La gente está agitada por la tormenta.

La luz de los relámpagos iluminan a la gente que se acomoda en sus camas ,otros que se sientan ,algunos que se paran y caminan hacia las ventanas y miran hacia el Río .

 Se escucha el llanto de niños.
Se escucha el sonido de los postigos que golpean.
Se escucha el sonido de un vidrio que se rompe.

La luz se corta. .

Plano del rostro de César a través de un vidrio roto que los relámpagos iluminan.

Subjetiva de la valija de cuero que César abre y saca el pequeño libro.
El niño se pone en la ventana con el vidrio roto.

Plano del rostro del niño con la lluvia por delante.Lsus manos abren el libro.Cierra los ojos.

Corte a flash-back:

Exterior-Senda de montaña. Noche.
Llueve torrencialmente sobre un paraje oscuro del que se vislumbra el barro del camino por los relámpagos que lo iluminan.

 Una mujer vestida de negro camina dificultósamente sobre un  camino embarrado. Lleva un candil de aceite al que protege con su chal, que le cubre la cabeza.

Mira hacia una casa de piedra cubierta de vegetación que tiene una ventana iluminada débilmente, en la que está un niño mirándola irse.


                                   Mujer
            Voy a lo del cura....el Ancora...César... el Ancora...por si no llegamos a     tiempo...

Corte a :

Interior.Habitación. Noche
Una habitación pequeña  construída de piedra, pintada a la cal. Es de extrema austeridad.Dos jergones con mantas.Sobre la pared y como único ornamento una cruz a lo alto entre ellas. A un costado un ropero rústico y un arcón.

Plano de un jergón en dónde un anciano respira con ronquidos dificultosos.

El niño va al arcón y de él saca un pequeño libro.

Mira el lomo que reza Ancora de Salvación.

César se arrodilla a los pies del jergón , abre el libro , se persigna, le toca los labios al  anciano con una cruz. La pone a su costado y comienza a recitar:

                                   César ( lee con seriedad)
            Por la agonía de tu hijo querido, por las penas y amarguras que sentiste al pié     de la cruz, asísteme en la muerte.

La habitación es iluminada por relámpagos .Cèsar se detiene en la lectura , mira hacia el anciano.

Insert  de la mano del niño que pone las puntas de sus dedos en los orificios nasales del anciano.

Suena el trueno. El niño mira hacia arriba .

El niño toma nuevamente el libro, con nerviosismo, y recita sin parar:


                                   César
            Te adoro llaga sacratísima del costado de mi dulce Jesús, abierto más por            amor a los hombres, que por el fiero golpe de la lanza. Dame, señor, asilo en tu   corazón lavando mis manchas con la sangre y agua que vertiste por esa llaga   santísima. Os adoro, manos sacrosantas, abiertas por mi amor, vosotras me        criasteis, de vosotras  espero la salvación.

El niño, iluminado por un relámpago, vuelve a mirar al anciano. Vuelve a sonar el trueno.
El niño sigue con las letanías:

                                   César
            Jesús, ten piedad de él, Jesucristo, ten piedad de él, Señor, ruega por él, Santa     María, ruega por él, San Abel, ruega por él, Coro de los justos, rogad, San    Abraham ruega por él.

 La mujer de negro aparece en el vano de la puerta con el cura. Están totalmente empapados.

 El viento y la lluvia entran con ellos.

El cura se acerca al anciano y le cierra los ojos.

El niño con una sonrisa mira hacia la mujer de negro que lo abraza y le dice...bien hecho mi rapaziño...bien hecho...

El niño la abraza
                                  
                                   César.
            .abuela, lo ayudé a llegar al cielo, el tío...  ya está en el Paraíso.

Funde a negro.

Fin flash-back.

Abre a:
Interior-.Dormitorio del Hotel de Inmigrantes. Día.
El sol entra por la ventana rota e ilumina a César sentado en el piso,  que apoya su cabeza en el borde la cama. Está dormido. Lo cubre la bandera.

Entra una mujer con una bandeja que tieneun  tazón humeante y pan. Está vestida austeramente como mucama, con gran delantal y cofia en su cabeza.
Deja la bandeja en la mesa de luz y le acaricia la cabeza con su mano.
El niño se despierta. Mira el tazón. Se frota la cara y los ojos.
El niño vuelve a la ventana.

La mujer se aleja mirándolo con tristeza.

Corte a :

Interior. Cocina del economato.Día.
Un hombre en musculosa y barbijo da vuelta filetes de carne que humean incansablemente.
Toma un gran cucharón y revuelve una enorme olla que humea.

Corte a:

 Plano de las manos de una mujer que teje encaje de bolillo.
Se escucha el sonido de las maderas golpearse incansablemente.
La mujer, rubia de ojos celestes levanta su rostro de la tarea.
                       
                                   Voz masculina en off.
            Perfecta...avísele a César que hay un telegrama...(las manos se detienen del         tejido) ...(el hombre toma aire)...dígale que tiene que ir al Hotel de           inmigrantes(las manos sueltan el tejido y los cilindros de madera que caen       al piso).

Corte a:

Exterior.Calle de tierra en pueblo. Día.
La mujer rubia, Perfecta, corre por una avenida de tierra  gritando ...llegó el chico...llegó el chico...

Insert :  Pasa la entrada en forma de arco que reza Hospital de Llanura V.L. y Planes.
Corre por una vereda .
Plano de un pabellón con cartel Economato y Cocina.

Corte a

Plano de las ruedas de un tren en carrera loca con vapores  y pitos de locomotora.

Corte a:

-Interior-. Hotel de Inmigrantes. día.
Puerta de entrada al gran dormitorio.
La mucama habla con un hombre de traje.

                                               Mucama
            No podemos seguir teniéndolo aquí...anoche la gente se asustó más de las            oraciones de él que de la tormenta...sabe Ud. lo que rezaba? Oraciones para        moribundos de ese libro....me lo han dicho otros paisanos que lo conocen.

El hombre de traje asiente con su cabeza.
La mujer entra al dormitorio y se dirige a César, que sigue ante la ventana rota.

                                               Mujer
            Niño Francisco...recoja sus cosas que lo llevaremos a otro sector.


El niño toma la valija y se cubre con la bandera. Mira por el agujero de la ventana rota.
Su rostro es de abatimiento y sus ojos están húmedos.
Mira a la mujer con resignación.
Da dos pasos con ella.
Se vuelve rápidamente hacia la ventana.

Ve a un hombre que corre por la vereda.

El hombre mira hacia arriba y se para.

Ve a un niño con la bandera sobre sus hombros ,a través de los vidrios rotos de la ventana.

El hombre echa a correr.

Plano del rostro del niño.De la seriedad del gesto imperturbable pasa al asombro.

El niño echa a correr.
Se lleva por delante a la mujer y al hombre, golpeándolos con la valija.

Corte a:

Interior- Hall con puerta de entrada y escalera de acceso al dormitorio del primer piso. Día.

El niño baja la escalera apresuradamente.

Insert : El hombre la sube.

Se detienen ambos y se miran.

Sus rostros son casi iguales.

Se acercan lentamente tomados del pasamanos, uno bajando y el otro subiendo.

Se abrazan.

La bandera los cubre.

Plano de la bandera española con jirones, en dónde se lee: 4to Regimiento de Cazadores de Ceriñola.




                        *                                 *                                 *